martes, 13 de marzo de 2007

Mis dibujos preferidos

NOVEDAD: Parodia

Ayer estaba durmiendo y pensando a la vez, cosa q acostumbro a hacer con bastante frecuencia, yo paso de soñar, eso es un rollo... y me acorde de los mejores dibujos animados del mundo mundial, y no es porque el protagonista se llame como yo, que también es un factor a tener en cuenta, pero es que como molaba 'David el Gnomo'.
Es la leche ese tipo pequeño con su gorro rojo, es que es hasta guapo, con su barba blanca, es una epecie de Papa Noel en chiquitito, y este no se anda con chorradas de unos renos voladores para desplazarse. Como me acuerdo cuando él y su amigo el zorro se iban de fiesta a la cueva de los trols y le decía: - Swift, tu que eres un zorro, presentame a tus amigas!!!
Como molaba 'David el Gnomo', no el mierda ese de Claus que pusieron luego, y no me digáis que no, con ese traje de merlín, ese no era gnomo ni nada, encima iba subido en un cisne, eso es una mariconada... y no hablemos ya de los que hay ahora, joder, que cada trol es de un color...
Para los que os acordáis un poco, para los que sois todavía jovenes y no lo conocisteis y para todos los que siempre quisimos ser gnomos y vivir en un árbol, aquí queda esto:

2 comentarios:

iberodev dijo...

a mi al principio me atemorizaban un poco estos dibujos. No los dibujos en sí, sino el hecho de poder encontrarme algún día por el bosque a un gnomo como el de la serie por aquello de que es "7 veces más fuerte que yo". No se, me acojonaba al imaginar que en una soleada mañana de domingo en el monte apareciera un enano con gorro rojo y me "diera el palo" robandome mis ahorrillos amenazándome con darme unas ostias si no le daba el dinero, y claro, se supone que David el gnomo me puede..
Pero luego, con el paso del tiempo, llegué a la conclusión de que esa fortaleza es proporcional a su tamaño, es decir, si nosotros (seres humanos la mayoría, especie de híbridos humano-burro unos pocos) podemos levantar una vez nuestro peso, David el gnomo puede levantar a 7 gnomos más! pero 7 gnomos no pesan más que yo, así que ahora ya no tengo miedo a ese puto enano.

David Ruiz dijo...

jejejejejejejeje