-Diálogo filosófico sobre el amor y esas pequeñas cosas-
Mistro: Ayer estuve yo pensando en temas trascendentales Fairo…
Fairo: ¿Qué es lo que te reconcome los entresijos querido amigo Mistro?
Mistro: Estuve pensando sobre temas del alma, quiero decir, sobre el amor, la fidelidad y si se deben perdonar los pequeños o grandes deslices en el ámbito del sexo y el amor…
Fairo: Lo mejor es que acotemos términos Mistro, ¿hablas de amor o de sexo?
Mistro: De ambas cosas, ¿acaso no van relacionadas? Bueno ya sé que el amor es algo que abarca más, y que no por amar a un amigo o a un familiar tienes por qué tener sexo con él para demostrárselo… no sé.
Fairo: Bueno, mi fiel amigo… ¿te he hablado más de una vez de mi querido ford focus rojo Vulcano verdad?
Mistro: Joder Fairo!, ya estás otra vez con tu puto coche!, yo aquí intentando abrir mis sentimientos hacia ti y me vienes con esas…
Fairo: Cállate coño! Si ni siquiera me has dejado empezar! Como te decía, bien sabes mi querido amigo que amo a mi coche mucho, muchísimo. No sólo por los esfuerzos que ha conllevado conseguirlo, el dinero que me ha costado y me cuesta mantenerlo… ni tampoco por ese precioso color rojo que lo viste tan agresivamente, no!
Ese coche y yo hemos vivido muchas cosas juntos, alegrías y penas, borracheras, momentos de locura y pasión… en fin, que le tengo muchísimo cariño…
Mistro: Si Fairo, lo sé, a mi también me gusta bastante tu coche y te pega mucho, tenéis como una especie de unidad invisible, y ambos brilláis cuando estáis juntos.
Fairo: Bueno, si, pero no siempre, alguna vez ha tenido algún problemilla y le he cambiado los manguitos, pero poca cosa, nada que no se pueda solucionar, y él bien vale mi esfuerzo y dedicación. Pero lo que te quería comentar… me encanta mi coche, pero hay veces que veo otros y…
El otro día por ejemplo, en la calle Doce de Octubre vi pasar un BMW 320 de color negro precioso, impecable, con pocos años. Y al verlo no pude evitar desearlo, me gustaría tenerlo, conducirlo, sentirlo, aunque sea por un momento, o unos días. Tiene que ser increíble disfrutar de un coche así.
Mistro: ¿Quieres decir que cambiarías tu Focus por ese BMW Fairo?
Fairo: No joder! A ver… ese BMW me encanta, y me encantaría aun más montar en él, sentir su potencia y su tacto al volante, despertar envidias entre la gente al pasar con él. Pero eso sí, mi Focus es mi Focus y lo quiero con locura, no lo cambiaría por nada del mundo… salvo que empezara a ir mal claro, nada es para siempre…
Mistro: Ah!! Creo que ya he entendido el símil… quieres decir que aunque ame con locura a mi novia, de vez en cuando es lícito y comprensible que sienta deseos de follarme a otra aunque sólo la quiera para eso, y luego volver con mi novia que debería perdonarme por no entregar mi amor y entregar tan sólo mi miembro por unos momentos…
Fairo: Joder Mistro! Eres un cerdo hijo de puta…
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